SSDSÉM,O

San Severino de Settémpeda, obispo

San Severino obispo, patrono de la ciudad había nacido en Septempeda, que en la actualidad se llama San Severino Marche, de noble familia cristiana, a fines del siglo V. Las pocas noticias que tenemos provienen de una «Vita» escrita entre el VII y el IX siglo, reescrita en una redacción tardía que amplía y llena de episodios el antiguo texto, ya de por sí legendario, a costa de la verdad histórica. De la «Vita» sabemos que Severino, junto a su hermano Victorino, a la muerte de sus padres renunció a una existencia fácil y regalada y se despojó de todos sus bienes, para entregarse a una vida de soledad, oración y penitencia sobre el monte Nero.

Por su fama de santidad el clero y el pueblo, muerto el obispo de Septempeda, lo eligieron su sucesor, y tal fue ordenado por el papa Virgilio. Murió un 8 de enero, mientras los Godos se movilizaban a la conquista del Piceno. La «Vita» carece de otra referencia cronológica, pero todas las tradiciones locales ponen los límites de su episcopado entre el 540 y el 545.

Siempre según la tradición, su cuerpo fue sepultado en la catedral de Septempeda, y quedó oculto a los registros de los Godos bajo un altar lateral. Fue fortuitamente recobrado en el 590 y trasladado el 3 de noviembre de aquel año a la nueva ciudad de Monte Nero, que tomará de él su nombre, y depositado en un lugar sacro, sobre el terreno en el que el santo había llevado su vida de eremita. La iglesia, construida por concesión del obispo Eudo en el 944, será después engrandecida y embellecida, y solemnemente consagrada el 8 de junio de 1198. Las reliquias del santo, nuevamente ocultas en el 1197 por temor de una profanación, fueron encontradas el 15 de mayo de 1576, durante los trabajos de ampliación del presbiterio.

Traducido para ETF de «San Severino terra di santi», a cura dell'Archeoclub di San Severino e della Biblioteca Comunale «F. Antolisei», que recogemos de Santi e beati. Nota de ETF: según puede verse en el Butler-Guinea (1964) del 8 de enero, parece que la inscripción de san Severino el 8 de enero obedece a una confusión con san Severino de Nórico, por lo que tampoco sabríamos exactamente qué día murió, si es que el 15 de mayo es el del encuentro de sus restos.