LAm7 REm7 Dicen que en los ojos se ve el alma, LAm7 REm7 que por ellos habla el corazón. FAm LAm7 Tú, Jesús, fijaste en mí tu mirada FAm MI7 Y he visto al Dios del Amor. Yo busqué tu rostro aún entre sombras, viva mi esperanza en el dolor y mi búsqueda se sorprendió con tu presencia que en mi vida se hizo resplandor. LAm7 REm7 Tú eres, Jesús, mi vida LAm7 REm7 Luz de mi ser, mi amor FAm LAm7 Tú me ganaste crucificado FAm MI7 Y eres mi resurrección Dicen que en los ojos se ve el alma y mi alma es de mi Señor. Cristo que mi rostro sea tú imagen. Ser como tu espejo es mi misión. Que este gozo con que me has colmado se derrame a mi alrededor. Que tu gracia, en mí, de su fruto con nuevos hermanos hoy.