Hay varios santos llamado Víctor venerados por la Iglesia, pero éste es definitivamente aquel de quien tenemos menos noticias. De hecho, en honor a la verdad, no nos ha llegado más que su nombre.
Posidio, biógrafo de San Agustín, al realizar el índice de obras del gran Padre, menciona un sermón -hoy perdido- dedicado al santo mártir Víctor, unido a la cita del salmo 116b (115): «Muy valiosa le es al Señor / la muerte de sus fieles.».
Es, por eso, imposible decir a cuál de los muchos santos del mismo nombre que vivieron en el norte de África podría haberse referido. El cardenal Baronio lo insertó en el Martyrologium Romanum del 10 de marzo, como testimonio de culto antiguo, y así ha permanecido también en el martirologio actual.
Ver Acta Sanctorum, marzo II, pág 33, y Posidonio, Catálogo de Obras de San Agustín, en Obrtas Completas de S.A., tomo XL, ed. BAC, pág. 886