El beato Tit Liviu Chinezu, hijo de un sacerdote greco-católico, nació en Iernuteni, cerca de Reghin, el 22 de diciembre de 1904. Enviado a estudiar a Roma, obtuvo la licenciatura en filosofía y la licencia en teología y recibió la ordenación el 18 de enero de 1931. De regreso a su tierra natal, fue nombrado profesor de teología y de 1940 a 1945 asumió el cargo de rector de la Academia de Teología de Blaj.
Nombrado protopresbítero de Bucarest en 1946, la policía secreta lo consideraba "uno de los más acérrimos opositores" a la acción del gobierno de "liquidar" a la Iglesia greco-católica. Detenido en la noche del 28 al 29 de octubre de 1948, fue encarcelado junto con los demás prelados y sacerdotes greco-católicos rumanos. En el campo de concentración de Caldarusani fue ordenado obispo clandestinamente el 25 de abril de 1949 con mandato secreto de la Nunciatura Apostólica; en una nota autografiada dirigida al Nuncio decía: "Ofrezco mi vida para servir a Pedro con toda franqueza y sinceridad". En el mes de mayo de 1950 fue llevado a la prisión de Sighet, donde, tras enfermar gravemente a causa del durísimo régimen de vida, no recibió tratamiento médico; antes de morir fue aislado en una celda, donde entregó su alma a Dios el 15 de enero de 1955. Fue enterrado en el "Cementerio de los pobres" en Sighet.
Tomado del decreto "Super martyrio".