Nicolás o Mykola Cehelsky nace en el seno de una familia grecocatólica en Strusiv, dIstrito de Ternopol, en Ucrania, el 17 de diciembre de 1896. Decide su vocación sacerdotal, y estudia en la Universidad de Lvov; se gradúa en teología el año 1923 y contrae matrimonio -según las tradiciones de su rito- en 1924 con Josefa Sartych, para ordenarse sacerdote el 5 de abril de 1925, incardinándose en la archieparquía de Lvov. De su matrimonio tuvo dos hijos y dos hijas. Fue destinado como párroco de la comunidad grecocatólica a Soroka, en el arciprestazgo de Hrymailivsk, donde desarrolló su trabajo con celo y perseverancia. Se deben a él la construcción de la iglesia y la superación de muchas dificultades que las comunidades católicas venían teniendo, y que el triunfo de Rusia en la II Guerra Mundial hizo más fuertes, por cuanto se quería la desaparición de la Iglesia grecocatólica.
Se le quiso intimidar, pero él no cejó en el cumplimiento de sus deberes sacerdotales y en la afirmación de su fe católica. Fue arrestado por ello el 28 de octubre de 1946 y acusado de actividades contrarias al estado, debiendo aguardar en la cárcel su juicio, en el que fue condenado a diez años de trabajos forzados el 27 de enero de 1947. Llevado al campo de concentración de Javas, en Moldavia, no resistió su salud las durísimas condiciones del campo y, agotado del trabajo al cabo de cuatro años, falleció en dicho campo el 25 de mayo de 1951, y fue enterrado allí mismo. Fue beatificado como mártir por el papa Juan Pablo II el 27 de junio de 2001 en su visita a Ucrania tras la recuperada libertad de la Iglesia grecocatólica.