De sufrir un accidente de tránsito a promulgar la palabra de Dios por redes sociales. Esa es la historia del padre Hernán Ceballos cuyas enseñanzas trascendieron las fronteras del Colegio de la Inmaculada Concepción, ubicado en el tradicional barrio San Martín al norte de la ciudad de Córdoba, y se difunden por todo el mundo gracias a las nuevas tecnologías.
“Querer ayudar a otros como Dios me ayudó a mi”, así define Hernán al origen de su vocación tras el grave siniestro vial que vivió junto a sus amigos. “Me cambió la perspectiva de vida. A partir de ahí descubrí que yo era feliz ayudando a otros”, sostuvo con alegría el padre sobre el camino de fe y servicio que transita desde hace 9 años.
Sobre su incursión como creador de contenido, el sacerdote explicó que sus videos son una especie de puente para llegar a la juventud y sobre todo para “Mostrar a un Dios alegre” algo que difiere con la imagen convencional que tiene la sociedad sobre la religión. Pero eso no es todo dentro de esta comunidad digital Hernán hace hincapié en el aprendizaje mutuo.
“Las redes sociales son un continente digital en el que todos convivimos. No podemos estar afuera pero tampoco entrar a ese continente a colonizar como colón sino aprender el lenguaje de ese continente y hablarlo Yo aprendo muchísimo de los jóvenes. Y ellos sienten un Dios cercano, que se puede hablar de Dios también en este espacio. Es el modo de estar con ellos en su vida cotidiana”, expresó el cura influencer.