Domingo Ninh fue un joven vietnamita que dio un alto testimonio de fortaleza moral en la profesión y confesión de la fe cristiana, por la que dio la vida. Había nacido en Trung-Linh el año 1842. Se dedicaba a la agricultura, y siendo un adolescente fue literalmente arrastrado por su padre a contraer matrimonio con una joven a la que él no amaba. Por ello reaccionó negándose a consumar el matrimonio y a tener por válida aquella unión. Aficionado a la lectura, procuraba su propia formación humana y religiosa. Acusado de ser un cristiano fervoroso fue arrestado y conducido delante del tribunal. El joven confesó su fe sin ambages y no sirvieron amenazas ni promesas para llevarlo a pisotear la cruz y renegar de Cristo. Fue torturado, maltratado y metido en una dura prisión donde hubo de padecer muchísimo, sin que las miserias de su detención debilitasen su fuerte ánimo. Por fin fue condenado a muerte y decapitado en An-Triem el 2 de junio de 1862. Fue canonizado el 19 de junio de 1988.