Gustavo o Gulstano, nativo de Gran Bretaña -por lo que su nombre original era Gwlstan- fue secuestrado por piratas en el siglo XI; después de muchos años de esclavitud fue desembarcado en la isla de Ouessant (Finistère), punta de la península de Bretaña, porque tenía un pie deformado por las fracturas. Allí fue recibido por Félix, un asceta que vivía como un ermitaño, y que luego quiso ser benedictino e ingresó en la abadía de Fleury-sur-Loire, no está claro si Gustavo lo siguió en esta abadía, pero sin duda que estuvieron juntos luego en la antiguo Abadía de Saint-Gildas de Rhuys, en la costa de Morbihan, donde Félix había comenzado la restauración del monasterio benedictino.
Gustavo era un simple lego analfabeto, sin embargo, había aprendido de memoria los salmos y oraciones, que cantaba día y noche, reservándose sólo tres horas de sueño. Félix le envió con otro monje a reconocer la isla de Hoedic, que se veía en el horizonte desde el monasterio, durante ese viaje murió Gustavo, el 27 de noviembre de 1040, en Beauvoir-sur-Mer, Vendée.
El sucesor de Félix a la cabeza de St-Gildas Rhuys, el abad Vitale, dice que, después de su muerte, el cuerpo del monje Gustavo, fue recogido por los monjes de San Filiberto de Noirmoutier, impresionados porque en su tumba se amontonaban objetos y cirios en agradecimiento por los favores recibidos. Cuando supo esto, el abad Vitale pidió al obispo Isemberto de Poitiers, para obtener por parte de los monjes la devolución del cuerpo del santo monje de Rhuys; y cuando lo obtuvo le hizo construir una tumba de piedra -que todavía existe-, ubicada en una capilla de la iglesia abacial. La tumba tuvo a lo largo del tiempo varios reconocimientos para distribución de las reliquias, en 1619, 1655, 1731, 1809 y la última en 1896, donde se pudieron ver las fracturas del pie que mencionó su biógrafo Vitale. Los monjes de Rhuys siempre estuvieron al cuidado de su culto, y san Gustavo se convirtió en el santo patrono de la iglesia parroquial de la villa, y dos aldeas en Vendée llevan su nombre.
Traducido para ETF de un artículo de Antonio Borrelli en Santi e Beati.
La imagen de san Gulstan, recogida a través de la Wikimedia francesa de la iglesia abacial del monasterio de San Gildas, está muy deteriorada, pero puede verse en la mano derecha un pez y en la izquierda el salterio.