Nació en Oriente en la segunda mitad del siglo VII. Fue presbítero de la iglesia de Milán, y compuso la epístola sobre la fe católica contra la herejía monotelita que el Concilio de Milán del 679 envió al emperador Constantino Pogonato. Una vez elegido obispo de Pavía, brilló por su ardor apostólico, y se empeñó en la conversión de los longobardos, todavía paganos o arrianos. Empleó años de su episcopado en recomponer el cisma de Aquileia (el llamado «de los tres capítulos»), que gracias a él tuvo fin en el Concilio de Pavía del 698. Se cuenta que en razón de la peste de Pavía obtuvo de Roma una reliquia del mártir san Sebastián, al cual consagró un altar en la iglesia de San Pietro in Vincoli; y la epidemia cesó inmediatamente. Murió un 12 de abril, quizás en los primeros años del siglo VIII, aunque la última fecha que se conoce sobre él es la mencionada del 698.
Traducido para ETF, con algunos cambios, de un artículo de Adriano Disabella. Sobre la cotroversia de «los tres capítulos», ver la historia general de la Iglesia; hay un resumen histórico en la Enciclopedia Rialp.