Jorge Edmundo Rene nació en Vezelay (Francia) el 16 de noviembre de 1748, era hijo de un abogado. Entró en el clero y obtuvo en su propia ciudad un puesto de canónigo. Llegada la revolución y suprimidos los cabildos, él no dejó Vezalay por ser su propia ciudad. Como se negó a prestar el juramento constitucional, se le condenó por incivismo el 21 de febrero de 1793, siéndole confiscados sus bienes, y arrestado y confinado como preso en el antiguo seminario a partir del 4 de abril.
Fue condenado a la deportación y salió para Rochefort, donde fue llevado a bordo del Washington el 19 de junio de 1794. A primeros de septiembre se le trasladó a la isla Madame, para entonces su estado de salud era ya desastroso. Prometió al Señor que si sobrevivía se dedicaría por entero a obras de celo apostólico, pero se dio cuenta de que moría y pidió se le recitaran las oraciones de la recomendación del alma. Murió el 2 de octubre de 1794 a las cinco de la mañana, dejando a todos edificados por su santa muerte. Fue beatificado por el papa Juan Pablo II el 1 de octubre de 1995.