Este sacerdote había nacido en Browskie Olki el 9 de septiembre de 1880 y había hecho sus estudios eclesiásticos en el seminario de Vilna, donde se ordenó sacerdote el 17 de julio de 1904. Fue destinado a Vilba, Surwiliski y Bielsk, sucesivamente, siendo premiados sus trabajos con el nombramiento de canónigo honorario de Pinsk.
Cuando estalló la guerra mundial fue nombrado vicario general para la zona de la diócesis de Pinsk, ocupada por soviéticos y nazis -sucesivamente-, sirviendo con gran celo a sacerdotes y seglares en tan difíciles circunstancias. Llevaba una vida ejemplar, muy austera y ascética, y era muy notable la piedad con que celebraba la santa misa.
Su arresto tuvo lugar el 15 de julio de 1943 junto con dos sacerdotes y cuarenta y siete seglares. Detenidos e interrogados, unas horas más tarde se les ordenó subir a unos camiones y fueron llevados al cercano bosque de Piliki donde fueron fusilados por la Gestapo y enterrados en una fosa común. El papa Juan Pablo II lo beatificó con otros mártires del mismo período el 13 de junio de 1999.