Dos días más tarde que san Juan Boste, fue ahorcado el beato Juan Ingram, arrastrado y descuartizado en Gateshead, por ser sacerdote. Había sido condenado en Durham al mismo tiempo que el P. Boste y el beato Jorge Swallowell. Nacido en Stoke Edith de Herefordshire, se había educado en el New College de Oxford. Después de su conversión, fue a estudiar en el Colegio Inglés de Reims y luego en Roma, donde recibió la ordenación sacerdotal en 1589. Tres años más tarde, se le envió a la misión de Escocia. A fines de 1593 fue arrestado en Tyneside. En Londres, se le sometió a la tortura en presencia de Topcliffe, pero, según dijo el propio mártir, «tomo a Dios por testigo de que ni en la tortura ni antes de ella, pronuncié el nombre de hombre, mujer o niño alguno, ni indiqué ninguna casa».
Véase Challoner, Memoires of Missionary Priests, pp. 197, 202-208, y 597-600. En las Publications de la Catholic Record Society, vol. V, se encontrarán muchos de los Epigramas latinos del P. Ingram (pp. 270-285) y dos cartas a sus compañeros de prisión. Esta breve noticia está extraída del más largo artículo del Butler-Guinea sobre «Los mártires de Durham de 1594», el 24 de julio.