Este mártir valenciano nació en Pego el 21 de diciembre de 1890. Ingresó en el seminario diocesano de Valencia donde hizo todos los estudios hasta su ordenación sacerdotal en 1919. Fue párroco de Margarida y luego de Villalonga, donde demostró sus cualidades de apóstol, organizando el catecismo de los niños y las campañas de alfabetÍ2ación. Abrió una escuela en su propia casa y brindó una estupenda educación a muchos chicos. Igualmente, fundó la banda de música con los niños, y para ellos estableció la congregación de San Luis Gonzaga. A los cuatro años de estar en Villalonga fue destinado a Valldigna, donde terminó de construir la iglesia. Pasó luego dos años como vicario de Santa María en Oliva, y de ahí lo destinó el arzobispado a Piles. No fue fácü su labor porque el clima de hostilidad a la Iglesia era muy espeso, pero él se empeñó en su notable labor catequética y formativa, insistiendo en la necesidad de la piedad y la vida interior. Abierto a todos y muy caritativo con los pobres, su vida de apostolado le preparó a su muerte martirial.
El 18 de julio de 1936 se encontró con que le sellaban la iglesia, le prohibían llevar sotana y le impedían salir de su casa, siempre vigilada. Le quemaron muebles y libros y le hicieron vivir a la espera de cosas peores. En la noche del 13 de agosto, día en que por la mañana había podido decir misa secretamente en su domicilio, irrumpieron en su casa y lo arrestaron; lo llevaron al Ayuntamiento y lo tuvieron allí hasta el día 15 por la noche en que lo sacaron para fusilarlo. Lo llevaron al campo, en la Palma de Gandía, y antes de matarle le arrancaron el escapulario y el rosario. Le quitaron también parte de su ropa. Murió dando vivas a Cristo Rey y perdonando a sus asesinos. Fue beatificado el 11 de marzo de 2001 por el papa Juan Pablo II en la ceremonia conjunta de los 233 mártires de la persecución religiosa en Valencia de los años 1936-1939.