Oh que bueno es vivir. Oh qué bueno es cantar. Oh qué bueno es sentirnos hermanos y amar. Todo sonríe, cuando hay amor. Todo renace, cuando hay amor. Ya no queremos más antifaz. Santos y honestos haremos paz. No más recelos, ni sangre azul; tan sólo hermanos y a plena luz. No más violencia, no es solución; sólo un lenguaje, sí – sí, no – no.