San Foilán es hermano de san Fursey. Ambos hermanos y un tercero, Ultán, llegaron juntos desde Irlanda a Inglaterra después del año 630. y fundaron un monasterio en Burgh Castle, de Yarmouth. Después de evangelizar a los anglos del este durante algún tiempo, san Fursey pasó a la Galia, donde murió hacia el año 648. El este de Anglia fue invadido por Penda y los mercios, quienes saquearon el monasterio de Brugh Castle. Entonces Foilán y Ultán decidieron seguir el ejemplo de su hermano. Así pues, partieron a Neustria, como lo había hecho Fursey y fueron muy bien acogidos por Clodoveo II. De Péronne, san Foilán pasó a Nivelles, donde Itta de Nivelles, viuda del Pipino de Landen, había fundado un monasterio del que su hija Gertrudis era abadesa. Itta regaló a Foilán unas tierras para que fundase un monasterio. San Foilán permaneció en estrecho contacto con la abadía de Nivelles, donde ejerció gran influencia. Además, se dedicó a predicar en Brabante y dejó allí profunda huella. San Foilán es uno de los más famosos entre los misioneros irlandeses de segunda importancia que vivieron en los monasterios del continente.
Hacia el año 655, la víspera del día de la fiesta de san Quintín, san Foilán cantó la misa en Nivelles y, en seguida, partió de viaje con tres compañeros. Al pasar por el bosque de Seneffe, unos bandoleros cayeron sobre ellos, les robaron y los asesinaron. Los cadáveres no fueron descubiertos sino hasta el 16 de enero del año siguiente. Santa Gertrudis mandó que fuesen sepultados en la abadía que san Foilán había fundado. En algunas regiones de Bélgica se venera a san Foilán como mártir, porque murió en el desempeño de una misión eclesiástica. Algunos autores afirman que fue obispo, pero tal afirmación carece de pruebas.
En Acta Sanctorum se hallarán algunos textos relacionados con el santo. El documento más importante es el apéndice de ciertos manuscritos de la primera biografía de san Foilán. B. Krusch, que lo publicó en Monumenta Germaniae Historica, Scriptores Merov., vol. IV, pp. 449-451, opina que su autor fue testigo presencial de los hechos y que era probablemente un monje irlandés que estaba al servicio de las religiosas de Nivelles. Dicho documento describe la muerte y el entierro del santo. Véase también Kenney, Sources for the Early History of Ireland, vol. I, pp. 503-504; Crépin, Le Monastére des Scots des Fossés, en La terre wallonne, vols. VIII (1923), pp. 357-385, y IX (1923), pp. 16-26; y L. Gougaud, Christianity in Celtic Lands, pp. 147-148. Tanto Itta, como Pipino eran considerados, antes de la reforma del calendario, como beatos, y Ultán, el tercer hermano, como santo.