El nombre de san Famiano deriva del latín y significa «el que ha adquirido fama». Era un monje cisterciense de origen alemán que fue por muchos años eremita en España. Había nacido en Colonia, y su nombre era Quardo, pero más tarde se le comenzó a llamar Famiano por la fama conquistada con sus milagros.
La pequeña población de Gallese era prestigiosa como centro religioso, e incluso había dado dos papas: Martín I y Romano I. esta fama atraía a peregrinos, entre ellos a Famiano, que aunque no era del lugar, murió en Gallese en 1150. Adriano IV lo canonizó con el nombre de san Famiano, y sus restos fueron depositados en una gruta donde en el 1155 se construyó una iglesia con su nombre. En ese lugar se conserva, en un precioso sarcófago en la cripta (es decir, la antigua gruta), el cuerpo del santo, patrono de la ciudad.
A su vez a tres kilómetros del centro histórico, en pleno campo, hay otra iglesia dedicada a su nombre: la capilla de San Famiano a Lungo. En ella se conserva la fuente de agua que el santo, el 17 de julio de 1150, al término de su peregrinación que lo había llevado por España, Roma y Tierra Santa, hizo brotar golpeando el suelo con su cayado. Aun hoy los 17 de julio el lugar es meta de una peregrinación que parte de la ciudad a primeras horas de la mañana. El culto del santo y el cuidado de las iglesias están confiados a la antigua confraternidad de San Famiano, reconstituida en 1990.
Nota de ETF: aunque en el artículo figura como canonizado por Adrián IV en 1154, no parece que se conserve sobre ese acto más testimonio que la tradición oral, que recoge la «Vita» escrita 4 siglos más tarde; el mismo escrito señala que en visita al santuario el papa Julio II, el 23 de julio de 1511, confirmó ante los canónigos el permiso de culto, lo que induce a creer que el acto anterior no estaba documentado debidamente.
Traducido para ETF (excepto la nota) de un artículo sin firma en Santi e beati. Acta Sanctorum agosto, II, pág 390ss dedica al santo un extenso artículo.