Evermodo adhirió en 1120 a san Norberto, y llegó a ser uno de sus más fieles discípulos. En 1131 san Norberto fundó un claustro premonstratense en una isla en el Saale, en Calbe, al sur de Magdeburgo (de donde era obispo). Evermodo cumplió algunas funciones allí, y fue finalmente preboste; luego fue trasladado al convento premonstratense de Magdeburgo. Una vez allí fundó cuatro nuevos conventos: en Havelberg, Jerichow, Quedlinburg y Pöhlde.
En 1154 fue elegido primer obispo de la recientemente fundada diócesis de Ratzeburg; allí convirtió el cabildo catedralicio en claustro premonstratense, y trabajó con los habitantes de las cercanías, evangelizando entre los wendos, por lo que se lo conoce también como Apóstol de los wendos. Comenzó en 1165 con la construcción de la catedral de Ratzeburg y echó las bases de la futura ciudad. Sus reliquias se encuentran en la catedral de Ratzeburg.