Nace en Algemesí, provincia de Valencia, el 10 de octubre de 1887 en una familia de condición modesta. Trabajaba en el campo. Contrajo matrimonio el 21 de enero de 1914 con Josefa Borras Borras, de la que tuvo seis hijos, siendo el suyo un hogar honesto y cristiano. Militante de Acción Católica, colaboró activamente en el Sindicato de Obreros Católicos y pertenecía a varias asociaciones religiosas, siendo en todo un católico ejemplar. Se volcó en educar a sus hijos cristianamente, llevándolos consigo a las funciones religiosas. Por medio de lecturas se procuró una buena formación religiosa, que utilizó en defensa de la religión, tan atacada entonces. Cada día rezaba el rosario en familia. Se opuso con toda energía a las huelgas revolucionarias, que él consideraba contrarias por completo a los verdaderos intereses de los obreros.
En 1931, proclamada la República, él fue el alma de la Junta de Obreros Católicos, logrando atraer a numerosos trabajadores a los ideales de la doctrina social católica. Fue asesor de la Confederación de Obreros Católicos de Levante y como tal dio numerosas charlas por los pueblos de la región. Difundía con gran celo la prensa católica. No dudó en hacer vigilancia nocturna para impedir el daño a los templos. Esto le trajo una primera detención el 20 de julio de 1936. Detenido por segunda vez al siguiente día 27 del mismo mes, estuvo detenido en varios sitios hasta que el 24 de septiembre de 1936 con otros compañeros fue sacado de la prisión y fusilado en el término de Alzira. Fue beatificado el 11 de marzo de 2001 por el papa Juan Pablo II.